Por Jesús Aguado
MADRID, 7 oct - El Gobierno español y los bancos acordaron el viernes una hoja de ruta para garantizar el a los servicios financieros a los pueblos rurales escasamente poblados y suavizar el impacto del aumento de los costes hipotecarios en los más vulnerables.
Según el plan, todos los pueblos de España de más de 500 habitantes tendrán al menos un punto de de servicios financieros, ya sea una sucursal bancaria, un cajero automático o una sucursal móvil.
Los bancos dispondrán de medio año para aplicar estas medidas, aunque el plazo puede prorrogarse seis meses, según el Ministerio de Asuntos Económicos.
La concesión de a los servicios financieros forma parte de un plan contra la despoblación rural, que es un reto importante en España, dijo el ministerio.
Sigue a otras iniciativas de las entidades financieras para ayudar a las personas mayores a hacer frente a un cambio hacia la banca online.
"El mes de febrero ya dimos un paso importante para mejorar la atención presencial de nuestros mayores y de las personas con alguna discapacidad, y ahora damos un segundo paso en el ámbito rural para cubrir el 100% de la población y del territorio de nuestro país", dijo el viernes a la prensa la ministra de Economía, Nadia Calviño.
Las aldeas con menos de 500 habitantes tendrán al dinero en efectivo a través de carteros rurales o soluciones alternativas, dijo el ministerio. No dijo cuándo se introducirá esta medida.
Estas medidas llegan en un momento en que los hogares vulnerables están luchando para hacer frente a los tipos de interés más altos.
Calviño dijo que seguiría trabajando en las "próximas semanas" con los bancos para ayudar a los titulares de hipotecas más vulnerables.
Entre las opciones que se barajan está la modificación de las medidas de ayuda, como la ampliación del número de familias que tendrían derecho a pasar de contratos hipotecarios con tipo variable a contratos con tipos fijos sin costes adicionales, según explicaron banqueros y una fuente del Gobierno.
En la actualidad, un código de buena conducta de todo el sector ya permite reestructurar los préstamos hipotecarios e incluso cancelar la totalidad del crédito pendiente.
"Tenemos que revisar este catálogo de medidas y, en su caso, ver qué mejoras se pueden incluir para poder hacer frente a esta situación sobrevenida", dijo Calviño.