Las réplicas generan pánico entre los rescatistas, voluntarios y periodistas durante un operativo de rescate. Sin embargo, tras el desagradable susto, se reanudan los esfuerzos para encontrar los cuerpos e incluso algún superviviente del sismo que azotó parte de Marruecos el viernes pasado.
PUBLICIDADEl impacto del devastador terremoto que sacudió a Marruecos el pasado viernes continúa generando desafíos inmensos para las labores de búsqueda y rescate. A medida que los rescatistas y voluntarios trabajan incansablemente para encontrar sobrevivientes y víctimas, las réplicas del sismo desencadenan momentos de pánico entre quienes están en la zona de desastre. Sin embargo, el valor y la determinación prevalecen, y se reanudan los esfuerzos para encontrar cuerpos e incluso algún superviviente.
Hasta el momento, el número de fallecidos roza los 3000 y los heridos son un poco más de 5600, según las cifras del Ministerio marroquí del Interior. El desastre ha afectado especialmente a las localidades rurales, que han quedado aisladas debido al bloqueo de varias carreteras.
Esta situación dificulta el transporte de alimentos y agua a estas áreas, que son las más castigadas por el terremoto.
Solidaridad en Marrakech
En Marrakech, una ciudad que ha perdido cientos de edificios, la solidaridad de sus habitantes se hace evidente. La comunidad dona lo que puede para ayudar a las zonas remotas en las montañas, donde la situación es crítica. Claudio, un voluntario italiano, señaló: "En este momento, vemos más la fuerza del pueblo marroquí y un poco menos de las instituciones, pero también están trabajando".
Las autoridades marroquíes están intensificando sus esfuerzos para llevar ayuda a las comunidades remotas. Se están lanzando suministros desde el aire hasta que los camiones de ayuda humanitaria puedan llegar a estas áreas. Esta ayuda incluye tiendas de campaña y otros recursos esenciales, pero se reconoce que es provisional.
Existe una preocupación creciente por la inminente temporada de lluvias, que podría agravar aún más el caos generado por el terremoto, convirtiendo el terreno en una gran masa de barro casi imposible de gestionar.
La ONU y la controversia de la ayuda Internacional
Sin embargo, una cuestión relevante en este contexto es la respuesta internacional. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) no ha recibido una petición oficial de ayuda por parte del Gobierno de Marruecos, según informó el portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric.
Esto plantea interrogantes sobre cómo Marruecos está gestionando las ofertas de ayuda internacional y si esta preferencia por ciertos países sobre otros puede tener implicaciones políticas. Dujarric subrayó que la decisión de aceptar la ayuda internacional es una cuestión soberana de cada país, basada en sus capacidades y preferencias.
El balance hasta este miércoles registraba 2 946 muertos y 5 674 heridos. Equipos de rescate de diversas nacionalidades, incluyendo españoles y británicos, continúan buscando víctimas entre los escombros de pueblos en el Atlas marroquí.
Además, el tema de la ayuda internacional ha generado cierta controversia. Francia ha ofrecido ayuda oficial de urgencia para el rescate de víctimas, pero Marruecos no ha aceptado esta asistencia, a diferencia de propuestas provenientes de otros países como España. Las fricciones en esta materia han sido objeto de discusión, pero el Ministerio francés de Exteriores ha enfatizado que "Marruecos es soberano" y que la decisión sobre las necesidades y la organización del socorro a las víctimas recae únicamente en el país afectado.
El terremoto en Marruecos ha desencadenado una compleja red de desafíos humanitarios y políticos, y la respuesta internacional continúa siendo objeto de seguimiento en medio de la urgente necesidad de ayuda en la región afectada.