Hay una larga lista de dirigentes europeos que han muerto en accidentes de avión y helicóptero, a menudo en circunstancias misteriosas. A continuación citamos algunos de los más sonados. Entre ellos, algunos que siguen sin resolverse a día de hoy.
PUBLICIDADEl presidente iraní, Ebrahim Raisí, no es el primer dirigente que muere en un accidente de helicóptero. Ni mucho menos.
Hay una larga lista de personalidades políticas y militares europeas que han muerto en accidentes o incidentes misteriosos a pesar de las medidas de seguridad, a menudo estrictas, aplicadas para protegerlos.
La mayoría de los accidentes mortales de helicóptero o avión se deben a fallos técnicos, errores del piloto o mal tiempo, pero algunos también están relacionados con teorías conspirativas más descabelladas.
Estos son algunos de los casos más sonados. Entre ellos hay algunos que siguen sin resolverse a día de hoy.
El secretario general de la ONU Dag Hammarskjöld
Dag Hammarskjöld, famoso diplomático sueco, murió en un accidente de avión de pasajeros en Zambia el 18 de septiembre de 1961. Las circunstancias del accidente aún no están claras.
El segundo secretario general de las Naciones Unidas de la historia viajaba en un avión de la compañía aérea sueca Transair con destino a la República del Congo.
Se dirigía a participar en las conversaciones de alto el fuego entre las fuerzas de la ONU y las tropas de Katanga, una provincia separatista del Congo, cuando se produjo el accidente. Murieron los 16 pasajeros que iban a bordo.
Según una investigación de 1962, la culpa fue de un error del piloto, que volaba a baja altura. Sin embargo, The Guardian informó en 2011 de que había nuevas pruebas de que el avión fue derribado sobre Rodesia del Norte (actual Zambia), y que las autoridades coloniales británicas supuestamenteencubrieron el incidente.
Empresas mineras y el antiguo servicio de Inteligencia ruso, el KGB, han sido acusados por separado de estar detrás del supuesto complot. 'Euronews' no puede verificar de forma independiente ninguna de las dos afirmaciones.
El primer ministro yugoslavo Džemal Bijedić
Džemal Bijedić fue un político bosnio que ocupó el cargo de primer ministro de la República Federativa Socialista de Yugoslavia, antiguo Estado socialista de los Balcanes.
Bijedić, que luchó en la Segunda Guerra Mundial como partisano yugoslavo pero se hizo un nombre en una serie de papeles políticos de alto nivel, murió en 1977 al estrellarse su Learjet contra la montaña Inač, en Bosnia-Herzegovina. También murieron su esposa Razija y otras seis personas.
Se atribuyó el siniestro al mal tiempo, pero eso no ha impedido que los teóricos de la conspiración sospechen de un siniestro complot de sus rivales.
Bijedić era considerado por algunos como el sucesor del anciano Tito, que lideró el movimiento partisano y dirigió el Estado socialista desde 1945. Tito, por su parte, murió tres años después de complicaciones debidas a la gangrena, y Yugoslavia se desmoronó en una serie de guerras en la década de 1990. Dos hijos y una hija sobrevivieron a Bijedić y su esposa.
El primer ministro portugués Francisco SáCarneiro
Conocido desde la Revolución de los Claveles de 1974, Francisco Manuel Lumbrales de Sá Carneiro lideró la Alianza Democrática de derechas que ganó las elecciones generales de Portugal en 1979. Pero su victoria duró poco.
De camino a un mitin electoral en Oporto, el Cessna del popular político se estrelló contra un edificio instantes después de despegar.
Una primera investigación conjunta de la policía y los funcionarios de aviación civil dictaminó que el accidente se debió a un fallo del motor. Sin embargo, un moderno análisis químico de partes de los restos de la aeronave realizado en 2004 indicó que se había colocado una bomba debajo de la cabina.
Existen varias teorías según las cuales el objetivo del supuesto asesinato era el ministro de Defensa, Adelino Amaro da Costa, que viajaba con Carneiro y supuestamente llevaba a la ONU documentos relacionados con la teoría de la conspiración de la Sorpresa de Octubre.
La teoría de la Sorpresa de Octubre de 1980 afirma que la campaña de Ronald Reagan retrasó en secreto la liberación de los rehenes estadounidenses en Irán para perjudicar las posibilidades de reelección del presidente Carter. Los rehenes fueron liberados justo después de la toma de posesión de Reagan.
Varias investigaciones del Congreso de Estados Unidos no encontraron pruebas suficientes para apoyar esta teoría.
El presidente polaco Lech Kaczyński
Lech Kaczyński fue presidente de Polonia hasta que murió en un accidente aéreo el 10 de abril de 2010. El accidente se produjo cerca de Smolensk, en el oeste de Rusia, y murieron los 96 pasajeros.
Muchos altos cargos militares, diputados polacos, dignatarios y la esposa de Kaczyński iban a bordo del avión destinado a llevar a la delegación para conmemorar el 70 aniversario de la masacre de Katyn, donde miles de oficiales polacos fueron ejecutados por los soviéticos durante la Segunda Guerra Mundial.
El avión intentó aterrizar en medio de una densa niebla en el aeropuerto de Smolensk Norte, a pesar de las advertencias sobre las malas condiciones meteorológicas y la recomendación de desviarse a otro aeropuerto.
El avión chocó contra las copas de los árboles, perdió el control y se estrelló en el bosque cercano a la pista.
El accidente tuvo importantes consecuencias para Polonia. Sumió al país de Europa del Este en el luto y planteó interrogantes sobre las decisiones que condujeron al accidente, incluida la posible presión sobre los pilotos y si el avión era adecuado.
La tragedia también suscitó debates sobre las relaciones entre Polonia y Rusia, dado el contexto histórico de la masacre de Katyn y las tensiones políticas existentes.
Mientras Kaczyński se convertía en una figura mártir nacional, su hermano gemelo Jarosław (líder oficioso del partido nacionalista de derechas PiS) utilizó la muerte de Lech para advertir de la injerencia e influencia negativa de Rusia en el país. Valeriya Novodvorskaya, política rusa, afirmó que el Kremlin había asesinado a Kaczyński. No presentó pruebas de esta acusación.