El Gobierno de Kazajistán ha declarado a 'Euronews' que ha decidido enviar a Brasil las grabaciones de las cajas negras del avión de Azerbaijan Airlines derribado, para que se divulgue de forma completa y transparente la tragedia.
Kazajistán ha decidido enviar a Brasil los registradores de vuelo del avión de Azerbaiyán Airlines derribado, según informaron fuentes gubernamentales kazajas a 'Euronews' en un comunicado, en una medida que indica la voluntad del país de que se divulgue de forma completa y transparente la tragedia.
En el comunicado, el Ejecutivo de Kazajistán afirma que ha tomado la decisión, porque el avión de la compañía azerbaiyana fue fabricado en Brasil, y la medida se produce "tras consultar con Azerbaiyán y Rusia".
"De acuerdo con las normas del Anexo 13 de la Convención de Chicago, el Estado que lleva a cabo la investigación garantiza la lectura de los registradores de vuelo y decide sobre la selección de un país para leer y descodificar las cajas negras", señala el comunicado, que añade que Kazajistán es miembro de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
La decisión indica que Kazajistán está de acuerdo con la exigencia de Azerbaiyán de que se lleve a cabo una investigación transparente sobre las circunstancias en las que el vuelo comercial J2-8243 de Azerbaijan Airlines se estrelló cuando intentaba realizar un aterrizaje de emergencia cerca de Aktau, el miércoles.
Azerbaiyán afirma que el avión fue alcanzado por un misil tierra-aire ruso sobre Grozni, capital regional de la república rusa de Chechenia, y que a continuación se le ordenó volar a través del mar Caspio tras denegársele un aterrizaje de emergencia en dos aeropuertos rusos cercanos.
Aliyev se muestra "molesto y sorprendido" por la versión rusa de los hechos
Horas antes de que Kazajistán anunciara su decisión, el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, señaló que el avión fue alcanzado por piezas de artillería lanzadas desde tierra, sobre el espacio de Rusia y "convertido en incontrolable por la guerra electrónica".
Aliyev acusó a las autoridades rusas de intentar "silenciar" el asunto durante varios días, y se declaró "molesto y sorprendido" por las versiones de los hechos ofrecidas por funcionarios del Kremlin.
"Desgraciadamente, durante los tres primeros días no escuchamos nada de Rusia sobre el tema, salvo versiones delirantes", dijo.
Aliyev afirmó que Azerbaiyán ha hecho tres peticiones a Rusiaen relación con el accidente.
"En primer lugar, la parte rusa debe disculparse ante Azerbaiyán. Segundo, debe itir su culpabilidad. En tercer lugar, debe castigar a los culpables, exigirles responsabilidades penales y pagar indemnizaciones al Estado azerbaiyano, a los pasajeros heridos y a los de la tripulación", declaró.
Aliyev señaló que la primera exigencia "ya se cumplió" cuando el presidente ruso, Vladímir Putin, le pidió disculpas el sábado.
Putin calificó el accidente de "trágico incidente", aunque no llegó a reconocer la responsabilidad de Moscú.
El Kremlin señaló que los sistemas de defensa antiaérea estaban activos cerca de Grozni, donde el avión intentó aterrizar, para tratar de neutralizar un ataque ucraniano con drones.
Aliyev dijo que se estaba investigando el accidente y que "la versión final de los hechos se conocerá cuando se abran las cajas negras".
Así, señaló que Azerbaiyán siempre estuvo "a favor de que un grupo de expertos internacionales" investigara el accidente y que había "rechazado categóricamente" la sugerencia de Rusia de que el Comité Interestatal de Aviación, que supervisa la aviación civil en la Comunidad de Estados Independientes, realizara las correspondientes investigaciones.
"No es ningún secreto que esta organización está formada en su mayoría por funcionarios rusos y dirigida por ciudadanos rusos. Los factores de objetividad no podrían garantizarse plenamente en este caso", declaró Aliyev.