Grandes inversiones en agricultura e infraestructura están dando sus frutos en granjas grandes y pequeñas. Visitamos Aldeia Nova, una empresa que trabaja con unos 700 agricultores de la zona que cultivan individualmente para producir carne, huevos y productos lácteos...
La provincia angoleña de Kwanza Sul, que es casi el doble de tamaño que Bélgica, ha realizado grandes inversiones en agricultura e infraestructura que están dando sus frutos en granjas grandes y pequeñas.
El pequeño agricultor se alía con los grandes inversores
PUBLICIDADVisitamos Aldeia Nova, una empresa que trabaja con unos 700 agricultores de la zona que cultivan individualmente para producir maíz, carne, huevos y productos lácteos de forma colectiva. Esta empresa está gestionada por un israelí que se crió en un kibutz y que sabe muy bien cómo trabajar de forma colectiva. Los kibutz son colonias agrarias israelíes.
"Nos preocupamos por repartir el trabajo entre hombres y mujeres", subraya Kobi Trivizki, consejero delegado de Aldeia Nova. "Por cuidar el medio ambiente, por la calidad, por la transparencia, nos esforzamos por cumplir con los plazos y por cumplir con sus expectativas" añade Trivizki.
La producción incluye miles de litros de leche al día, convertidos en mantequilla, queso, helado y yogur. Seis toneladas de carne a la semana. Un cuarto de millón de huevos al día, y 1 millón de litros de aceite de soja al año.
Gracias a la mejora de las carreteras y otras infraestructuras, Aldeia Nova puede competir con otros grandes productores en supermercados en Luanda y en otras ciudades. Es un gran logro para los cientos de agricultores de Kwanza Sul.
Agricultores como Julio Miguel, crían pollos y venden los huevos a través de Aldeia Nova. Cada agricultor recibe dos o tres hectáreas de tierra cada uno."Requiere responsabilidad, porque si quieres que la empresa confíe en ti para que te entregue las aves, tienes que funcionar correctamente, con el orden y la disciplina que ellos esperan", destaca Julio Miguel. "Así es como obtenemos los ingresos para mantener a la familia, a los hijos, el colegio y el hogar", apunta el agricultor.
Aldeia Nova recibe inversiones internacionales de una empresa israelí, pero la gestión directa la asume Kobi Trivitzky, que genera confianza y compromiso entre los agricultores. "Mi colonia me educó para ver las necesidades de los demás. Aprendí a trabajar, a entender la agricultura y a pensar en las personas que te rodean, no sólo en ti mismo" destaca el directivo de Aldeia Nova.
Para los inversores que saben lo que ofrece el mercado, existen muchas oportunidades en la agricultura y sectores relacionados, especialmente si las condiciones estructurales siguen mejorando.
"Se han hecho muchos esfuerzos, y lo percibo como un inversor extranjero", señala Eduardo Lima. El Ejecutivo nacional de Lonagro cree que Angola ha cambiado. "Se han mostrado más favorables, en infraestructura, en electricidad... Hay nuevas presas...", apunta Lima.
Las grandes también dan de comer a Angola
Fazenda Santo Antonio es una mega granja de miles de hectáreas, dirigida por una empresa portuguesa, que cultiva maíz, soja y cría ganado vacuno y porcino, con planes de ampliar sus operaciones con otros 10 millones de euros de inversión. La mejora de las infraestructuras, incluyendo las carreteras, la electricidad y el agua, han facilitado a los agricultores el cultivo y la comercialización de sus productos. Es la mayor granja de regadío de Angola, con 5.000 hectáreas cultivadas y 1.200 cabezas de ganado.
El gerente de la empresa, José Alexandre Silva, apunta por qué se instaló en Kwanza Sul: "Podemos encontrar el tiempo adecuado, el agua... Tenemos dos ríos... El clima es muy importante, y la altitud. Así que basicamente tenemos la mejor carne de cerdo, la mejor carne de vacuno y el mejor maíz para que Angola coma".Las 790 cerdas de su granja producen casi 22.000 cerdos al año."Lo que queremos es que la gente venga aquí a invertir, porque necesitamos unas 200 explotaciones como ésta para que Angola sea autosuficiente", concluye el gerente de Fazenda Santo Antonio.
Aceptando el reto, empresas internacionales están creciendo en Angola, con el fin de mantenerse un paso por delante de la competencia.