Una declaración conjunta de la UE denunciando "irregularidades" en las elecciones presidenciales de Venezuela fue bloqueada por Hungría, lo que llevó a Josep Borrell a publicar su propia declaración.
PUBLICIDADLa Unión Europea se ha unido a las voces que exigen una mayor transparencia en Venezuela para esclarecer quién ha sido el legítimo ganador de las elecciones presidenciales celebradas el domingo, que Bruselas describe como "empañadas por numerosos fallos e irregularidades".
Sin embargo, los llamamientos a nuevas sanciones son "prematuros" en este momento, ha dicho un portavoz este martes, insistiendo en la necesidad de "encontrar una salida a la crisis política."
"Las discusiones entre los Estados continúan. También estamos interactuando con nuestros socios, tanto a nivel nacional como regional e internacional, para evaluar todo el proceso y decidir los posibles pasos siguientes", declaró el portavoz.
"Pero cualquier discusión, cualquier decisión relativa a las sanciones se están tomando de forma confidencial entre los Estados , así que esto es muy prematuro".
El Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por aliados del Gobierno, ha declarado ganador de las elecciones al actual presidente, Nicolás Maduro, con el 51,2% de los votos, seguido de Edmundo González, candidato de la oposición, con el 44,2%.
Pero González y su alianza política, la Plataforma Unitaria, han impugnado enérgicamente los resultados, argumentando que las cifras publicadas por el CNE no coinciden con los sondeos de opinión y las estimaciones estadísticas.
La oposición afirma que ha obtenido el 73% de las actas de escrutinio, que muestran que González obtuvo 3,5 millones de votos más que Maduro. "Tenemos en nuestras manos las actas que demuestran nuestra victoria categórica y matemáticamente irreversible", dijo González a sus partidarios.
Aunque las elecciones fueron aclamadas como una de las más pacíficas de los últimos tiempos, las protestas que han desencadenado se han vuelto cada vez más tensas, con manifestantes tomando las calles y enfrentándose a la Policía. Los partidarios de la oposición veían en las elecciones del domingo la oportunidad más creíble de poner fin a 25 años de gobierno de partido único.
Maduro ha condenado las manifestaciones, señalando a Estados Unidos. "Se está tratando de imponer un golpe de Estado en Venezuela nuevamente de carácter fascista y contrarrevolucionario", dijo el presidente. "Ya conocemos esta película".
El veto de Hungría contraataca
Uno de los puntos de discordia es la negativa del CNE a publicar los resultados detallados de cada circunscripción, que pueden utilizarse para cotejar las cifras a escala nacional.
En un comunicado emitido el lunes por la noche, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, pidió al CNE que "ejerza la máxima transparencia en el proceso de tabulación de los resultados, incluyendo el inmediato a las actas de votación de cada colegio electoral y la publicación de los resultados electorales desglosados".
"Los resultados de las elecciones no han sido verificados y no pueden considerarse representativos de la voluntad del pueblo de Venezuela hasta que se publiquen y verifiquen todas las actas oficiales de los colegios electorales", declaró Borrell.
"La UE hace un llamamiento a la calma e insta a las fuerzas de seguridad a que garanticen el pleno respeto de los derechos humanos, incluido el derecho de reunión pacífica", añadió.
La UE dice que hubo "condiciones desiguales" en la votación
La declaración enumera una serie de "obstáculos" y "condiciones desiguales" en el proceso electoral, como detenciones arbitrarias e intimidación de de la oposición, deficiencias en el censo electoral y desequilibrio en el a los medios de comunicación.
En un principio, el texto iba a ser firmado por los 27 Estados , pero Hungría bloqueó la iniciativa, según declaró un funcionario de la UE con conocimiento de las conversaciones. Esto llevó a Borrell a publicar la declaración por su cuenta, hablando en nombre del bloque.
Una situación casi idéntica se produjo el mes pasado, cuando Hungría impidió la publicación de una declaración conjunta en la que se denunciaba la prohibición de los medios de comunicación occidentales por parte del Kremlin.
El veto supone una mala noticia para cualquier esfuerzo futuro por reforzar las sanciones contra el régimen de Maduro. Las sanciones actuales de la UE se remontan a 2017 e incluyen la prohibición de exportar armas y equipos utilizados para reprimir las protestas callejeras y la lista negra de 54 personas acusadas de socavar la democracia y el Estado de derecho en Venezuela.