El Gobierno lituano afirma que reforzará la seguridad de sus redes eléctricas con Polonia antes de la desvinculación prevista del sistema energético ruso el mes que viene.
Lituania está reforzando la seguridad en torno a la conexión energética del país con Polonia antes de su desconexión prevista de los sistemas de energía de la región del Báltico, una red de la era soviética compartida con Rusia y Bielorrusia. El primer ministro lituano, Gintautas Paluckas, afirma que el Gobierno ha pedido a las fuerzas policiales que protejan la red eléctrica compartida con Varsovia.
Tras los recientes incidentes y sospechas de sabotaje en el mar Báltico, Vilna considera crucial que se intensifiquen las medidas de seguridad en torno al enlace LitPol. El mes pasado, el anterior Gobierno lituano decidió aumentar la seguridad de la estación convertidora y transformadora del LitPol, cerca de la ciudad de Alytus, en el sur de Lituania.
Esa misión se encomendó a una empresa de seguridad privada, a la que se contrató para proteger las instalaciones hasta la primavera. Después, traspasarían las tareas de protección al Servicio de Seguridad Pública del país. Paluckas, que asumió el cargo el 12 de diciembre, anunció el miércoles que su Gabinete ha decidido iniciar el proceso de transición la próxima semana.
"Evaluamos todas las versiones posibles de sabotaje, desde la ciberseguridad hasta las acciones físicas. Por ello, desplegamos el Servicio de Seguridad Pública, porque es el que tiene más experiencia en la protección de los objetos críticos. Sustituirán a los servicios de seguridad privados que han venido protegiendo estos objetos", declaró Paluckas en rueda de prensa.
La situación actual en el mar Báltico es complicada
Según Lituania, desde hace algún tiempo el mar Báltico presenta una situación "muy peculiar", ya que han aumentado los incidentes de daños y destrucción de infraestructuras submarinas.
"Sea intencionado o no, el número de estos incidentes aumentará. El mar Báltico es muy peculiar, es relativamente poco profundo y los cables no lo son tanto. Por tanto, estos incidentes se repetirán, porque Rusia está utilizando la flota fantasma", declaró Giedrimas Jeglinskas, presidente de la Comisión de Seguridad Nacional y Defensa del Parlamento.
Según la oficina del primer ministro lituano, Vilna está observando "intentos claros e inequívocos de los opositores de perturbar" su prevista desvinculación de los sistemas energéticos rusos. No ofrecieron más detalles sobre cuáles son esos intentos ni quién podría estar detrás de ellos.
Vilna ofrece garantías al pueblo lituano
Sin embargo, el Gobierno ofreció garantías a la opinión pública afirmando que no hay ningún escenario en el que el país se quede sin electricidad. Las autoridades también añadieron que, en caso de que se produzcan interrupciones, éstas no alejarán al país de su antiguo objetivo de desconectarse de la red eléctrica del Kremlin.
"No hay ningún escenario en el que Lituania se quede sin electricidad. Hemos evaluado todos los escenarios, incluido el funcionamiento sin interconexiones. Se han evaluado esas reservas y se han elaborado los escenarios A, B, C, D, etcétera", dijo Arnoldas Pikzirnis, viceministro lituano de Energía.
"Quizá el mensaje más importante que queremos transmitir es el siguiente: a pesar de cualquier provocación que pueda producirse, de cualquier incidente, la desconexión de BRELL (Bielorrusia, Rusia, Estonia, Letonia y Lituania), la red eléctrica rusa, es inevitable y se producirá exactamente dentro de un mes", señaló Pikzirnis.
Los países bálticos esperan desacoplarse de la red energética rusa compartida con Bielorrusia el 8 de febrero. A partir de entonces, se encargarán de gestionar sus propias redes nacionales, que llevan años modernizándose. El desarrollo de esas redes contó con 1.600 millones de euros de financiación europea.