El funeral del Papa Francisco se celebrará en un clima geopolítico bastante tenso. La maquinaria vaticana trabaja para definir el tablero diplomático, Trump se sentará lejos de Zelenski según el ceremonial de la Santa Sede
Faltan pocos días para el funeral del Papa Francisco y la maquinaria vaticana trabaja a toda máquina para definir los detalles de la ceremonia. De acuerdo con los deseos del Pontífice, la ceremonia será sobria y simplificada, pero la actual situación geopolítica exige prestar especial atención a la disposición de las 130 delegaciones, un auténtico juego de encaje para evitar que el momento de la conmemoración fomente crisis diplomáticas.
El ceremonial de la Santa Sede definirá la disposición de los asientos de los representantes de los Estados que asistirán al funeral del difunto Pontífice.
El orden alfabético de los asientos será en francés
Al igual que en los funerales de Juan Pablo II en 2005, las delegaciones se sentarán por orden de importancia, pero siguiendo el orden alfabético de los países francófonos. Así, Donald Trump, presidente de Estados Unidos (en francés États-Unis), no se sentará junto a Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania (en francés Ukraine), sino que podría situarse entre los Estados africanos Eswatini y Etiopía, no lejos del jefe del Elíseo, Emmanuel Macron.
Este rompecabezas debería evitar situaciones embarazosas, cuando no auténticos desatinos diplomáticos. El orden alfabético italiano, por ejemplo, habría sentado a Trump y Zelenski no muy lejos. Pero se eligió el francés como lengua de la diplomacia.
El líder ucraniano había hecho saber que había solicitado una reunión con el presidente estadounidense al margen de la ceremonia en el Vaticano, tras la desastrosa visita a la Casa Blanca. De momento no hay nada confirmado, pero aún no se descarta que los dos líderes mantengan encuentros informales en la capital italiana.
Al parecer, los mandamases de la UE Ursula von der Leyen, António Costa y Roberta Metsola también están considerando la posibilidad de mantener conversaciones bilaterales tras la ceremonia.
Las delegaciones se sentarán según un esquema preciso
Los representantes de Italia y Argentina, país natal del Papa Bergoglio, se sentarán en primera fila. Se espera que el presidente Javier Milei llegue a Roma el viernes por la mañana, donde rendirá homenaje al difunto Pontífice, a pesar de las rencillas del pasado.
Le seguirán los de las casas reales católicas, el Gran Maestre de la Orden de Malta, las casas reales no católicas y, a continuación, los representantes de los Gobiernos de las demás naciones por orden de importancia según la nomenclatura sa.
En primer lugar se sentarán los países representados por un jefe de Estado, a continuación un jefe de Gobierno, seguidos de los países representados por un ministro y, por último, un Embajador. Las autoridades civiles se sentarán en el lado derecho del parvis, frente a la basílica. Los cardenales se alinearán frente a la entrada.
Se espera que la delegación italiana sea la más numerosa, con unas setenta personas. Participarán el presidente de la República Sergio Mattarella, acompañado de su hija Laura, la primera ministra Giorgia Meloni, el presidente del Senado Ignazio La Russa, el presidente de la Cámara de Diputados Lorenzo Fontana, el presidente del Tribunal Constitucional Giovanni Amoroso y el ministro de Asuntos Exteriores Antonio Tajani.
Las casas reales presentes en las celebraciones
Guillermo de Gales, Príncipe heredero del Reino Unido, representará al país, como es tradición, junto con el primer ministro Keir Starmer. Los de la realeza española, Felipe y Letizia, estarán acompañados por tres ministros. Pedro Sánchez estará ausente. También estarán presentes los reyes de Bélgica, Suecia, Noruega y Mónaco.
Los reyes de Holanda, Guillermo Alejandro y Máxima, no asistirán al funeral, sin embargo, debido a la coincidencia de la fecha con el Día del Rey, que celebra el cumpleaños del soberano. Una ausencia notable fue la de Máxima, soberana católica y argentina, a diferencia de la mayoría protestante de sus súbditos.
Los grandes ausentes en el funeral en la Plaza de San Pedro
Los grandes ausentes serán Vladímir Putin y Benjamin Netanyahu, sobre ambos líderes pesa una orden de detención internacional por crímenes de guerra. La orden contra Putin, emitida en 2023, llegó a las oficinas del Ministerio de Justicia pero no estaba entonces en la Fiscalía General de Roma: un paso necesario para que sea ejecutable.
Según algunos medios de comunicación italianos, Putin aunque venga a Italia podría no ser detenido, pero el ministro Nordio dijo que esto no es posible porque la activación de la orden de detención tendría lugar si Putin estuviera en Italia o si se supiera de su inminente visita. Rusia estará representada en la plaza de San Pedro por la ministra de Cultura, Olga Lyubimova. Por Israel sólo estará el embajador ante la Santa Sede, Yaron Sideman.
El atuendo ceremonial será sobrio
Los hombres que asistan a la ceremonia deberán llevar un traje oscuro con corbata larga negra y un botón del mismo color en la solapa izquierda de la chaqueta. Dicho look remarca la sobriedad del evento
Para las mujeres, un vestido, a ser posible largo, con guantes y un velo en la cabeza todo de color negro. El único adorno permitido aparte de guantes o el velo es un collar de perlas.