La Policía ha detenido a un ciudadano británico de 53 años como autor de los hechos, descartando la hipótesis de un ataque terrorista. Ha sido arrestado por intento de asesinato y drogas. Las cifras de heridos rondan el medio centenar con 27 hospitalizados, dos de ellos en estado grave.
Un hombre británico ha sido arrestado en Liverpool tras embestir con su furgoneta, ayer lunes, contra un grupo de aficionados del equipo de fútbol homónimo que ayer, lunes, celebraba la victoria de su equipo en la Premier League inglesa. La Policía informa de, al menos, unas 45 personas heridas, incluyendo cuatro niños.
Las autoridades trabajan con la hipótesis que el hombre, de 53 años de edad, es el único implicado en el incidente, por lo que no se está investigando como un acto terrorista. 27 personas fueron trasladadas al hospital, dos de ellas con heridas graves, y otras 20 recibieron atención médica por heridas leves en el lugar de los hechos.
Hasta cuatro personas quedaron atrapadas debajo del vehículo, incluido uno de los menores de edad, y tuvieron que ser rescatadas por los bomberos. Los aficionados del Liverpool celebraban haber ganado el campeonato de la Premier League, su vigésimo título en la máxima categoría y un récord para el equipo.
"Nos aron poco después de las 18:00 horas del lunes, tras recibir informaciones de que un coche había colisionado con varios peatones en Water Street", señalaron anoche las autoridades en un comunicado. Un video en redes sociales muestra cómo la camioneta atropella inicialmente a un hombre antes de desviarse hacia la multitud, donde se abre paso antes de detenerse por completo.
Peter Jones, aficionado de la Isla de Man, afirma que oyó el coche estrellarse contra la multitud y vio al menos a media docena de personas en el suelo. "Oímos un pitido frenético: un coche pasó a toda velocidad junto a mi amigo y a mí. La gente lo persiguió e intentó detenerlo, destrozándole las ventanas traseras", dijo Jones. "Luego atropelló a varias personas". La Policía afirmó estar realizando investigaciones exhaustivas para determinar la causa del accidente y pidió a la gente no especular ni compartir contenido perturbador en línea.
"Ha ensombrecido profundamente lo que había sido un día feliz para la ciudad", declaró anoche el alcalde de Liverpool, Liam Robinson, durante una rueda de prensa nocturna. El primer ministro Keir Starmer calificó las escenas como "espantosas" y elogió la valentía de las fuerzas de seguridad. "Todos, especialmente los niños, deberían poder celebrar a sus héroes sin este horror", declaró el 'premier' británico.
El legado del Liverpool Football Club se ve ensombrecido por otro desastre ocurrido hace 36 años, cuando 97 de sus aficionados murieron en una aglomeración durante un partido contra el Sheffield en el estadio Hillsborough. La tragedia se vio agravada por el encubrimiento de la causa y varios errores policiales.
Los aficionados no pudieron celebrar públicamente el último título de liga del club en 2020 debido a las restricciones impuestas durante la pandemia de coronavirus en la ciudad y el país británicos.