¿Va al Festival Fringe de Edimburgo? Aquí le indicamos dónde comer, alojarse y visitar la capital escocesa.
PUBLICIDADAl salir de la estación de Waverley, en el corazón de la capital de Escocia, verá enseguida por qué millones de personas de todo el mundo viajan cada año a Edimburgo.
Antiguas calles serpenteantes, edificios históricos y enclaves de la UNESCO rodeados de santuarios naturales se funden con algunos de los mejores restaurantes, hoteles, tiendas y, por supuesto, el caos creativo anual del festival Fringe, para crear una ciudad que lo tiene todo.
Ya sea un afortunado residente local, un visitante solitario o una familia viajera, esta completa guía de la ciudad le dirá todo lo que necesita saber sobre dónde alojarse, dónde comer y qué hacer para que su estancia en Edimburgo sea inolvidable.
Qué hacer en Edimburgo
Explore la ciudad bajo tierra en una visita embrujada
A los amantes de los sustos les recomendamos la visita a las Auld Reekie Haunted Vaults. Con muchas historias espeluznantes que contar, su guía le adentrará en las bóvedas subterráneas secretas, donde descubrirá la oscura historia de fantasmas, quemas de brujas, la peste y torturas de la ciudad, que le dejarán con ganas de un buen trago en el vecino pub Banshee Labyrinth.
Si le gusta la historia y quiere pasear por lo que queda de las calles subterráneas del Edimburgo del siglo XVII, vaya un poco más arriba de la Royal Mile hasta Mary King's Close.
Suba a Arthur's Seat
Hay tanto que hacer en Edimburgo que es fácil perderse el paisaje único que rodea la ciudad. Una excursión por el volcán extinto de Edimburgo (que algunos creen que fue el verdadero emplazamiento de Camelot) le regalará una impresionante vista de 360º de todos los lugares emblemáticos y le hará apreciar la majestuosidad del lugar.
La subida al Arthur's Seat es bastante corta y fácil, apta para niños y mayores de la familia que aún sean relativamente activos. Hay varias rutas, algunas atraviesan los 650 acres del Parque de Holyrood y pasan junto al Palacio de Holyrood, otras siguen una antigua corriente de lava.
También es posible subir a Castle Rock, que lleva a otro volcán extinguido sobre el que está construido el Castillo de Edimburgo.
Bares tradicionales y coctelerías de lujo
Desde tradicionales pubs escoceses hasta opulentos bares de cócteles, Edimburgo es un lugar excelente para disfrutar de una o dos copas.
Tonic es un bar íntimo escondido en la planta subterránea de Castle Street, con una galardonada carta de cócteles y DJs que pinchan regularmente desde R'n'B de la vieja escuela hasta música disco.
Si lo que busca es un auténtico bar de copas, vaya a Sandy Bell's, donde vivirá una auténtica experiencia escocesa, con mucho whisky incluido. O pruebe el speakeasy secreto más reciente de Edimburgo, en Angel's Share, donde podrá bailar lindy-bop al ritmo de sesiones de jazz en la pista de baile; es imprescindible reservar.
Dónde comer en Edimburgo
Contini: Para un festín italiano
Contini Valvona & Crolla es famosa por ser la tienda de delicatessen y vinos más antigua de Escocia (y anteriormente fue nombrada por Real Orden proveedora de quesos finos de Su Majestad la Reina). Fue fundada en 1934 por un inmigrante italiano hijo de un pastor de las montañas de los Abruzos.
Desde entonces, su familia se ha convertido en la "realeza gastronómica" de Edimburgo, creando algunos de los restaurantes más increíbles, asequibles y familiares de la ciudad. Contini, situado en lo alto de George Street, es uno de ellos.
Obtiene sus ingredientes de Valvona & Crolla y los combina para crear la mejor comida italiana que se puede degustar fuera de Italia. Aquí no encontrarás pizza, pero los arancini, la burrata, la milanesa de pollo y el tiramisú están para morirse.
Los niños también tienen su propio menú, pero en lugar de comer los típicos filetes de pescado y nuggets de pollo, disfrutan de versiones en miniatura de lo que comen los mayores.
Timberyard: Comida escocesa con estrella Michelin
Si quiere derrochar en una comida especial, diríjase al Timberyard, galardonado con una estrella Michelin. A tiro de piedra del Usher Hall, uno de los principales escenarios de Edimburgo, es el lugar perfecto para deleitarse con platos tradicionales escoceses, elaborados con elegancia.
Se utilizan ingredientes locales procedentes de proveedores artesanos para garantizar un menú sostenible y de temporada durante todo el año, aprovechando al máximo la abundante despensa natural de Escocia.
Una gran noticia para los veganos o los alérgicos: a diferencia de muchos otros restaurantes, el menú se adapta a sus necesidades dietéticas.
Yamato: Comida japonesa asequible y de calidad
En Haymarket, no deje de visitar Yamato, un excepcional restaurante japonés escondido en una calle lateral. Las vieiras pescadas a mano, de origen local, y el filete de wagyu A5 constituyen una comida muy especial, sobre todo si se maridan con la fabulosa variedad de sake y vino de ciruela que ofrecen.
A pesar de su altísima calidad, Yamato tiene un precio muy razonable y unas raciones sorprendentemente grandes. Por 11 libras (13 euros), se puede conseguir un enorme plato de rollos de sushi que sería fácilmente suficiente para el almuerzo.
Qué hacer con niños en Edimburgo
Departamento de Magia: Para los fans de los magos
Tanto si eres un niño grande como pequeño, el Departamento de Magia te dará la dosis de magia que necesitas después de explorar los numerosos lugares de interés de Harry Potter en Edimburgo.
Aunque técnicamente no tiene nada que ver con Harry Potter, aquí podrá participar en una clase de pociones (después de la cual podrá beberse su poción en la taberna mágica), probar un "embrujador" té de la tarde o resolver su escape en una sala de escape llena de hechizos.
El Chocolatarium: Para un capricho educativo
Explore el mundo del chocolate visitando el Chocolatarium y sumérjase en su propia experiencia de elaboración del chocolate.
En esta microfábrica aprenderá todo sobre cómo se hace el chocolate y de dónde viene, y tendrá la oportunidad de probar más de 40 sabores de chocolate en la Sala de Degustación.
Para un toque más adulto, también hay una experiencia de chocolate y whisky (o chocolate y vino).
Museo Nacional de Escocia: Exposiciones siempre cambiantes
La bella, abierta y luminosa arquitectura de este edificio hace que merezca la pena visitarlo, sea cual sea su edad. Pero las galerías interactivas, las exposiciones siempre cambiantes y los divertidos días de eventos (sobre todo durante los festivales de Edimburgo) equivalen a una fantástica excursión de un día para los niños.
La visita es gratuita, con una cafetería y un restaurante en la azotea por si quiere quedarse a comer, y hay tanto que hacer que le resultará fácil pasar las horas; algo que puede resultar muy útil en un día lluvioso.
Dónde alojarse en Edimburgo
Puede resultar tentador alojarse en el bullicio del casco antiguo o en la elegante New Town de Edimburgo. Pero también merece la pena elegir un hogar lejos de casa entre las pintorescas calles adoquinadas de Stockbridge, con casas adosadas cubiertas de flores y fantásticas tiendas benéficas, o en el recién transformado barrio costero de Leith.
Si está dispuesto a ir un poco más lejos, en los suburbios de Portobello y Gullane, encontrará también algunas playas preciosas, donde podrá tomar el sol (si tiene la suerte de que le toque), atreverse con un baño en agua fría y disfrutar un poco de la campiña escocesa.
Si quiere algo diferente, acérquese al Fingal in Leith, un precioso y antiguo barco de 1963 convertido en hotel boutique. El chef Conor Toomey, antiguo miembro del Condita, galardonado con una estrella Michelin, estará en su restaurante durante el Fringe 2024, los días 23, 24 y 25 de agosto.
Para disfrutar de un ambiente luminoso y diáfano en una casa urbana georgiana, pruebe Eden Locke, junto a Princes Street. ¿Y para una decadencia hedonista? No puede perderse el opulento y sobrecogedor hotel House of Gods.