He visitado el lago de Como en solitario y con poco presupuesto: aquí tienes mis mejores consejos sobre qué hacer y adónde ir.
PUBLICIDADEn el tren que viene de Milán, pienso en la escapada de fin de semana perfecta en el lago de Como. Tranquilos paseos por la orilla, viajes en ferry a lugares escondidos y deliciosa comida italiana. Estoy deseando desconectar y resetear.
Pero me doy cuenta demasiado tarde de que hay huelgas de transporte previstas para el fin de semana, que afectarán a autobuses, trenes, etc., y alertas por tormentas para el domingo. Esto significa que el itinerario aproximado que tengo en mente queda de repente en el aire.
Sorprendentemente, como una estresada y poco habitual viajera en solitario, encuentro la falta de rutina extrañamente liberadora. Sin una lista de atracciones imprescindibles, no tengo que preocuparme por marcar ninguna casilla: puedo hacer de este viaje lo que yo quiera. He aquí cómo otros viajeros solitarios con presupuesto ajustado pueden disfrutar del lago de Como sin sentirse agobiados ni presionados.
¿Dónde alojarse en el lago de Como con poco presupuesto?
Aunque las estancias en el lago de Como pueden ser muy caras, sobre todo en hoteles románticos y de lujo, me sorprendió gratamente la cantidad de albergues y alojamientos económicos disponibles.
Me alojé en el Ostello Bello Lake Como, en la ciudad de Como, por su asequibilidad y su cercanía al lago. Una cama en un dormitorio de seis habitaciones me costó 133 euros por dos noches, pero es probable que sea mucho más barato en temporada baja.
Me encantó el ambiente divertido y relajado del albergue, que ofrece una serie de actividades como picnics al atardecer junto al lago, cenas familiares, 'beer pong' y noches de juegos. También tiene un montón de asientos al aire libre, una cocina muy bien surtida y espaciosa, y una comida excelente.
Otros alojamientos económicos en Como son el New Generation Hostel Lake Como y el Hotel Il Loggiato dei Serviti, pero hay que tener en cuenta que están un poco más alejados del centro de la ciudad. También hay apartamentos a buen precio, pero suelen estar menos céntricos.
¿Qué hacer en el lago de Como?
La costa del lago de Como está salpicada de extravagantes villas rodeadas de jardines botánicos que los visitantes pueden explorar. Aunque debo itir que no son lo mío. En cualquier caso, las continuas huelgas de transporte y el mal tiempo dificultaron mucho la visita a las villas.
Prefiero explorar ciudades escondidas y pueblecitos, disfrutar del paisaje y cenar en restaurantes locales. Para evitar las aglomeraciones turísticas de finales de verano en ciudades más grandes como Bellagio y Varenna, decidí visitar el pueblecito de Nesso.
Nesso, famoso sobre todo por el Orrido di Nesso, una escarpada cascada, es una pequeña aldea situada en la bifurcación occidental del lago. Sus pocos restaurantes, cafés y tiendas están encaramados en lo alto de un acantilado, al que se accede por escaleras, mientras que las casas se aferran al borde hasta arriba.
La subida me pareció inesperadamente larga y empinada, pero el tiempo fresco fue sin duda una ventaja, y las vistas desde la cima, absolutamente fascinantes. Las escaleras pueden ser bastante empinadas y resbaladizas en algunos tramos, sobre todo si llueve, por lo que merece la pena saber que hay un autobús cada hora desde la cima hasta Como, como alternativa al ferry.
Argegno es otra gran opción. Aunque es mucho más pequeña que las demás ciudades turísticas, cuenta con una gran variedad de restaurantes a precios razonables, la mayoría con vistas al lago.
Algo que me encantó en Como fue el funicular Como-Brunate. El billete cuesta seis euros por trayecto y el viaje dura unos siete minutos. En la cima, la recompensa son unas vistas impresionantes, además de restaurantes, cafeterías y bares donde comer algo rápido.
Es posible que tenga que esperar bastante para subir, tanto en la parte inferior como en la superior, así que asegúrese de reservar un par de horas para este viaje. Es mejor llegar a primera hora del día para disfrutar de las mejores vistas y de menos aglomeraciones. La catedral de Como, el Teatro Sociale y las termas romanas también merecen una visita.
¿Cuánto dinero necesitas para visitar el lago de Como?
No tenía mucho presupuesto para actividades, así que planeé explorar el lago de Como en ferry. Tenía un billete de libre circulación, que te permite bajarte en cualquier parada de una ruta determinada -como de Como a Bellagio- para pasar el día por 23€. Si no piensas hacer excursiones caras en barco, entre 60 y 80 euros al día deberían ser más que suficientes para moverte por Como.
Sin embargo, el ferry no siempre es la mejor forma de desplazarse, ya que puede ser lento, poco frecuente en algunos casos y depender del tiempo. Los autobuses suelen ser una mejor opción, ya que son mucho más regulares y fiables. En general, me encantó el ritmo relajado de este viaje, y disfruté pasando tiempo a solas con mis pensamientos, libre del estrés cotidiano.
Sin embargo, a veces me sentí un poco fuera de lugar, sobre todo cuando había muchas parejas y familias, como en la cima del funicular. También me resultaba un poco incómodo pedir a los demás que me hicieran fotos, así que me limité a hacerme 'selfies'.
¿Dónde comer en el lago de Como?
Como en sí no es conocida por tener la mejor comida, con mejores opciones en Bellagio y Varenna. Sin embargo, el Ristorante Osteria dal Pain es un sitio económico, con un buen 'pizzoccheri' (un tipo de pasta de trigo sarraceno con patatas, col y queso Casera) y varias opciones de polenta. Una cena aquí me costó 25 euros por un plato principal, una guarnición y una bebida.
Ostello Bello también tenía un buen desayuno, por 6,90 euros, y una excelente cena, con varias opciones de pasta y pizza. La pizza y la bebida costaban 11€, seguidos de una generosa ración de sandía cortesía de la casa.
En Argegno, comí una lasaña muy buena en el Hotel Argegno; con una bebida, la cuenta ascendió a 10,50 euros. Luego fui al Ristorante Barchetta, al lado, a tomar un tiramisú, algo más caro (7€), pero mereció la pena. Durante todo el viaje me limité a las bebidas sin alcohol, así que probablemente el precio sea un poco más alto si bebes.
En cuanto al helado, no hace falta decir que hay muchas opciones. Me sorprendió gratamente una de las heladerías del lago de Como, Al Molo, que tenía un sabor divino a Nutella por 4,50 euros la bola. Aunque es un poco más de lo que pagaría normalmente, las vistas merecían cada céntimo. El Bar Gelateria Lol, en Nesso, también prepara un helado delicioso, especialmente sublime el de coco, por menos de tres euros.