Atraviese impresionantes cadenas montañosas mientras degusta deliciosos platos en estos viajes en tren únicos en la vida.
PUBLICIDADA medida que los viajeros buscan alternativas ecológicas al avión, los viajes en tren experimentan un renacimiento. La creciente demanda de viajes panorámicos y pausados, servicios ferroviarios opulentos y nuevos trenes nocturnos redefinen el concepto 'slow travel' (viajar sin prisas), mezclando nostalgia y sostenibilidad.
Pero los trenes no sólo sirven para llegar al destino, sino que forman parte del viaje. Uno está de vacaciones desde el momento en que se pone en marcha, gracias a las magníficas vistas, los cómodos asientos o camas y la deliciosa comida. Con la introducción de pases de tren flexibles y asequibles y más opciones de billetes que nunca, los trenes están cada vez más cerca de ser tan económicos como los vuelos.
Los viajes en tren por Europa, en particular, han experimentado un aumento del interés, impulsado por la generación Z y la generación milenial, preocupadas por el medio ambiente, que dan prioridad a los viajes sostenibles y sin complicaciones.
Por qué el tren es mejor que el avión
Aunque volar sigue siendo popular, el sitio web de reservas Rail Europe informa de un cambio hacia opciones de viaje más ecológicas y relajadas. "Los trenes ofrecen una experiencia más fluida que los aviones: se puede embarcar rápidamente, evitar los límites de equipaje y disfrutar de un viaje sin estrés", afirma Björn Bender, consejero delegado de Rail Europe.
Destaca el atractivo de los trenes nocturnos para los viajeros solitarios, que valoran "el ahorro en hoteles y tiempo de viaje", mientras que las familias y los viajeros mayores aprecian su comodidad y conveniencia.
El ocio sigue siendo la principal razón para viajar en tren, con un aumento de los viajes largos y panorámicos. "Las rutas que atraviesan zonas de gran belleza natural, como Suiza, atraen a quienes buscan algo más que un viaje de punto A a punto B", explica Bender.
De cara al futuro, Rail Europe se centra en simplificar y hacer más accesibles los viajes en tren. "La transparencia en los precios y la facilidad de reserva son demandas clave que estamos abordando", añade. Los nuevos servicios de trenes nocturnos y las rutas más panorámicas son opciones destacadas, que responden a la practicidad y al deseo de un viaje más lento y sostenible.
Estos son algunos de los mejores viajes en tren para 2025:
El Glacier Express, Suiza
Apodado el "tren exprés más lento del mundo", el Glacier Express de vía estrecha une St. Moritz y Zermatt, ofreciendo un asiento en primera fila del paisaje alpino suizo en un espectacular viaje de ocho horas. A medida que el tren serpentea por las montañas, el paisaje cambia continuamente, revelando poco a poco impresionantes picos, profundos valles y pueblos alpinos encantadores.
La ruta cruza 291 puentes y atraviesa 91 túneles, cada uno de los cuales ofrece una nueva perspectiva de los Alpes suizos. A continuación, se asciende al puerto de Oberalp, el punto más alto de la ruta, que ofrece unas vistas épicas. A bordo, lo más importante es la comodidad y la calidad. ¿Y la comida? Especialidades regionales suizas y vinos de calidad, que añaden un toque de excelencia gastronómica al viaje panorámico.
El Orient Express, de París a Estambul
Los viajes en tren de lujo son fundamentales para el renacimiento de los viajes en tren, ya que despiertan la nostalgia por la elegancia y la grandeza de la época dorada del ferrocarril. Una de las novedades más significativas es el regreso del Orient Express, un viaje en tren de París a Estambul que inmortalizó la escritora de novelas policíacas Agatha Christie.
A partir de 2026, el Orient Express invitará a los viajeros a revivir la leyenda a bordo de 17 vagones originales del Orient Express que datan de las décadas de 1920 y 1930. Estos vagones han sido meticulosamente restaurados y adornados con una decoración excepcional.
Los interiores, diseñados por el arquitecto francés Maxime d'Angeac, presentan elementos de inspiración Art Déco, exquisita marquetería y sofisticado mobiliario, garantizando que cada detalle encarna el lujo del Orient Express original.
El Expreso de la Reunificación, Vietnam
A lo largo de más de 1.700 kilómetros, el llamado Expreso de la Reunificación es una forma aventurera de conocer Vietnam, uniendo Hanói en el norte con Ciudad Ho Chi Minh en el sur. Aunque ningún tren lleva oficialmente este nombre, la ruta capta el espíritu de unidad, y su historia se remonta a 1936, cuando los ses terminaron la línea.
Los servicios se interrumpieron en 1954 durante la división de Vietnam, reanudándose el 31 de diciembre de 1976 como símbolo de la reunificación. Este viaje en tren es tanto una experiencia como un destino. Se deslizará entre montañas neblinosas, apacibles arrozales y encantadoras ciudades costeras, con vistas siempre cambiantes tras su ventanilla.
A bordo, la lentitud del trayecto le permitirá darse un festín de aperitivos vietnamitas, charlar con sus compañeros de viaje y empaparse del bullicio de las paradas en las estaciones locales.
De Derry/Londonderry a Coleraine (Irlanda del Norte)
Aclamado por Michael Palin como "uno de los viajes en tren más bonitos del mundo", este trayecto de 38 minutos por los brumosos paisajes de Irlanda del Norte es corto pero espectacular. Siguiendo el río Foyle desde Derry/Londonderry, el tren se adentra en la exuberante campiña antes de mostrar la costa atlántica y las doradas arenas de Benone Strand.
Las vistas son el principal atractivo de este tren sin complicaciones, cuyas vías discurren junto a una de las playas más vírgenes de Irlanda del Norte. La pintoresca estación de Castlerock, diseñada por John Lanyon, es un elemento clave del viaje. Este pueblo costero es una parada perfecta para hacer un picnic en la playa o pasear por sus encantadoras calles.
Desde espectaculares paisajes marinos hasta ondulantes campiñas, esta corta ruta destila la belleza natural de Irlanda del Norte en menos de una hora, prueba de que los viajes épicos no tienen por qué ser largos.
El tren de Ella a Kandy (Sri Lanka)
Apodado uno de los viajes en tren más pintorescos del mundo, el popular trayecto de siete horas de Ella a Kandy le lleva a través de la exuberante región del té de Sri Lanka. Montañas imponentes, cascadas y ondulantes plantaciones verdes llenan el paisaje mientras el tren serpentea por estrechas vías.
A la hora de elegir su clase, abundan las opciones. La primera clase con aire acondicionado ofrece asientos reservados y un fresco confort, pero no ventanas abiertas, por lo que se perderá el placer de asomarse a las puertas, una tradición de los viajes en tren por Sri Lanka.
Si lo que busca son ventanas abiertas y un ambiente más local, la 2ª clase reservada es ideal, con asientos cómodos y sin pasajeros de pie. ¿Se siente aventurero? Pruebe la 3ª clase no reservada: la misma configuración, pero los asientos por orden de llegada aumentan la diversión ligeramente caótica. Los billetes para las clases sin reserva son fáciles de conseguir; basta con presentarse en la estación, coger el billete y subirse al económico tren azul.
Rovos Rail, Sudáfrica
Fundada en 1989 por el empresario sudafricano y entusiasta de los trenes Rohan Vos, Rovos Rail se ha forjado una reputación como una de las mejores formas de viajar despacio por el sur de África, ofreciendo una serie de itinerarios de varios días que muestran los paisajes más asombrosos del continente.
Con base en Pretoria, esta compañía ferroviaria privada ofrece viajes únicos por los exuberantes viñedos sudafricanos, los desiertos de Namibia o las extensas sabanas de Botsuana. Si entra, encontrará un mundo de elegancia del viejo mundo. Los camarotes del tren evocan una época pasada, con madera pulida, asientos de suave cuero y amplias suites que ofrecen confort y estilo. Los vagones restaurante sirven comidas gourmet, mientras que el elegante vagón salón es perfecto para relajarse y contemplar el cambiante paisaje.
El Rocky Mountaineer, Canadá
El Rocky Mountaineer, uno de los viajes en tren más apreciados de Norteamérica, ofrece cuatro rutas panorámicas por el oeste de Canadá, las Montañas Rocosas canadienses y el suroeste de Estados Unidos, donde los escarpados paisajes alpinos y la vida salvaje se pueden disfrutar exclusivamente en tren.
Considerada la joya de la corona de Canadá, la flota ferroviaria totalmente domotizada opera exclusivamente durante el día, lo que garantiza vistas ininterrumpidas de paisajes remotos al tiempo que ofrece un servicio impecable. Cada ruta ofrece una experiencia única, pero el "Primer Paso al Oeste" es especialmente memorable.
Sigue los caminos históricos de los pioneros del siglo XIX y atraviesa montañas imponentes, ríos caudalosos y valles verdes. Los vagones con cúpula acristalada le sumergirán en el panorama, mientras que los miradores exteriores le permitirán acercarse aún más a la acción. Desde avistamientos de fauna salvaje en los valles hasta las espectaculares cascadas del Cañón Fraser, cada momento a bordo ofrece una nueva perspectiva.
TranzAlpine, Nueva Zelanda
El viaje TranzAlpine de Nueva Zelanda es un espectáculo ferroviario de cuatro horas que le lleva de costa a costa a través de la Isla Sur, desde Christchurch hasta Greymouth. El tren ofrece un asiento en primera fila para contemplar algunos de los paisajes más impresionantes de Nueva Zelanda, con llanuras onduladas que dan paso a gargantas fluviales, ríos glaciares y los Alpes del Sur cubiertos de nieve.
Los vagones al aire libre ofrecen una conexión inigualable con el paisaje, mientras que los comentarios en los asientos activados por GPS garantizan que no se pierda los momentos más destacados del viaje.
Ferrocarril de Ffestiniog, Gales
Desde 1832, el Ferrocarril de Ffestiniog ha sido una piedra angular del patrimonio galés y cuenta con varias líneas que recorren el glorioso Parque Nacional de Eryri (Snowdonia). Utilizado originalmente para transportar pizarra azul desde las canteras de Blaenau Ffestiniog hasta el puerto de Porthmadog, este ferrocarril retro de vía estrecha ofrece ahora a los pasajeros un viaje a través de la historia y la naturaleza galesas a bordo del emblemático servicio El Espíritu de la Montaña.
Su épico viaje de 13½ millas (21 kilómetros) comienza en la ciudad costera de Porthmadog, ascendiendo constantemente a través de exuberantes campos, densos bosques y brillantes lagos hacia Blaenau. Suba de categoría al servicio Gold para disfrutar de los asientos del Observation Bay y de unas vistas incomparables desde este tren de vapor restaurado con esmero.