Hasta hace poco, la plaza Gaudí era el escenario elegido por los turistas para grabar vídeos de TikTok, lo que causó considerables trastornos.
Frente a la Sagrada Familia de Barcelona, grupos de turistas posan para hacerse selfies. Se agolpan en la acera ante la famosa basílica diseñada por Gaudí e incluso se suben a la calzada para conseguir un mejor ángulo.
Esta búsqueda de una foto digna de Instagram se produce a expensas de la vida cotidiana de los residentes. Desde hace más de una década, los barceloneses arremeten contra las aglomeraciones de visitantes que obstaculizan el paso de los peatones y entorpecen el tráfico en torno al recinto religioso.
Ahora, las autoridades barcelonesas han presentado un plan para delimitar una zona específica para que los turistas puedan fotografiarse y al mismo tiempo descongestionar el tráfico. Se trata de la última medida de las autoridades para regular el turismo excesivoen Barcelona, uno de los principales destinos turísticos de España.
El espacio selfie de la Sagrada Familia "reconciliará a los turistas con el barrio"
El Ayuntamiento de Barcelona ha anunciado que creará una zona especial junto a la Sagrada Familia donde los visitantes podrán tomarse un respiro -y un selfie- antes de entrar en el templo. Dicho espacio, de 6.200 metros cuadrados, estará situada entre la fachada del Nacimiento de la basílica y la plaza Gaudí, en la calle de la Marina.
Hasta hace poco, la plaza Gaudí era el escenario elegido por los turistas para una tendencia TikTok que causó considerables trastornos. Consistía en que los visitantes equilibraran sus teléfonos en las escaleras mecánicas del metro para grabarse mientras el emblemático monumento aparecía de fondo. La tendencia provocó que los turistas atascaran las salidas de las estaciones y acabó prohibiéndose.
"El nuevo proyecto ayuda a resolver un espacio en el que es difícil conciliar los usos entre los visitantes del templo y el vecindario", dijo el Ayuntamiento de Barcelona en un comunicado de prensa.
El plan de zona de encuentro costará 2,7 millones de euros
Está previsto que las obras de la zona de encuentro comiencen después del verano y finalicen en abril de 2026, coincidiendo con el centenario de la muerte de Gaudí. El proyecto, de 2,7 millones de euros, forma parte de un plan más amplio de 15,5 millones para mejorar las infraestructuras y la gestión de visitantes en torno al recinto sagrado. La Sagrada Familia atrae a 4,7 millones de visitantes al año y es el segundo lugar más visitado de España, después de la Alhambra de Granada.
Barcelona, que atrae a 32 millones de visitantes al año, ya ha introducido varias medidas para frenar el turismo excesivo. En 2024, la ciudad puso en marcha un plan de 44 millones de euros para regular las aglomeraciones en 16 puntos turísticos mediante el despliegue de más personal de limpieza y agentes de seguridad para mantener el orden y la seguridad.
El turismo debe servir al modelo de ciudad
El pasado mes de julio, la ciudad abandonó su eslogan 'Visit Barcelona' de 15 años en favor del nuevo 'This is Barcelona', marcando un cambio de imagen que aleja al destino del turismo de masas.
Barcelona también se ha comprometido a prohibir el alquiler de apartamentos a corto plazo a los turistas para 2028 y a limitar los desembarcos de cruceros. El año pasado, tras el anuncio, el alcalde de la ciudad, Jaume Collboni, declaró que la decisión respondía al riesgo de que Barcelona se convirtiera en un parque temático sin residentes. "El turismo tiene que estar al servicio del modelo de ciudad, no al contrario", añadió.