El corte interrumpió los servicios ferroviarios, las redes telefónicas y los cajeros automáticos en toda la península ibérica, convirtiendo estaciones, centros deportivos y aeropuertos en refugios temporales. Unos 35.000 pasajeros de tren y metro fueron rescatados por los servicios de emergencia en España.
Para el martes por la mañana, se había restablecido el suministro eléctrico en más del 92% de España, con las autoridades prometiendo una recuperación total para el final del día. Las autoridades dicen que la causa sigue bajo investigación, pero han descartado un ciberataque.