El magistrado del Tribunal Supremo Ángel Hurtado ha procesado al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y a la fiscal jefe provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, por un delito de revelación de secretos por las filtraciones del caso de la pareja de Isabel Díaz Ayuso por fraude fiscal.
El magistrado del Tribunal Supremo, Ángel Hurtado, ha procesado al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, por un delito de revelación de secretos contra el novio de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador.
Tras más de siete meses de investigación, el juez considera que existen indicios suficientes para juzgarle por la filtración de los correos electrónicos que la defensa de González Amador envió a la Fiscalía para cerrar un acuerdo en la causa que se sigue contra él por fraude fiscal.
El magistrado sostiene que el fiscal general filtró estos correos "a raíz de indicaciones recibidas de la Presidencia del Gobierno". Hurtado da por concluida la investigación, que ha demostrado además que García Ortiz cambió de móvil y borró sus mensajes de WhatsApp en cuanto el Supremo abrió la causa el pasado octubre.
Álvaro García Ortiz confirma que no va a dimitir
Sin embargo, el fiscal general ha confirmado este lunes que no va a dimitir: "Se reafirma en su compromiso de continuar defendiendo la actuación y la integridad de la institución que representa al frente de la misma. Y reitera su inocencia sobre los hechos que son objeto de imputación", aseguran desde la Fiscalía.
El magistrado ha procesado además por ese mismo delito a la fiscal jefa provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, que facilitó a García Ortiz los correos del abogado de González Amador.
García Ortiz envió los correos a la cadena 'SER' para que se dieran a conocer. El mensaje contenía información sensible (...) de unas conversaciones privadas entre su letrado y el fiscal encargado del caso", pero el fiscal general del Estado no dudó en filtrarlo.
El Gobierno mantiene su apoyo al fiscal general y Bolaños niega que hubiese indicaciones de Moncloa
El Gobierno de Pedro Sánchez ha confirmado su apoyo al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, pese a su procesamiento por revelación de secretos, mientras que el Partido Popular (PP) ha reclamado que abandone el cargo.
Además, fuentes de Moncloa han manifestado que el Ejecutivo español mantiene su respaldo al fiscal y confían en que se puedan aclarar las circunstancias de las filtraciones relacionadas con el caso abierto por presunto fraude fiscal a la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.
El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha negado que hubiese indicaciones de Moncloa al fiscal general del Estado, como recoge el auto del Supremo y ha lamentado que el Tribunal Supremo "haga una afirmación tan grave sin ninguna base probatoria".
Núñez Feijóo pide que el fiscal general del Estado deje el cargo
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha señalado que ha llegado el momento de que se vaya el fiscal general del Estado y "quien le daba las indicaciones", refiriéndose a Pedro Sánchez.
Feijóo ha pedido la salida de García Ortiz a través de la red social X y ha aprovechado para insistir en que Pedro Sánchez tiene también que dejar la Presidencia del Gobierno, aunque sin mencionarle expresamente.
La filtración del correo pone en cuestión el prestigio de la institución
El magistrado apunta además que antes de que el correo fuera difundido por los medios, desde la Fiscalía enviaron copia del mismo a Pilar Sánchez Acera, mano derecha del entonces jefe de gabinete de Moncloa y actual ministro para la Transformación Digital, Óscar López.
Sánchez Acera se lo envió a su vez al secretario general del PSOE de Madrid, Juan Lobato, y le dio instrucciones "para que lo mostrara en la Asamblea de la Comunidad de Madrid en contra de su presidenta, Isabel Díaz Ayuso".
La filtración del correo pone en cuestión el prestigio de la institución y, sin duda, "podría tener indudables efectos perjudiciales en el fundamental derecho de defensa del afectado", critica el magistrado.