Los espacios dedicados al arte proliferan: un teatro para la ópera; M+ un nuevo espacio especializado en arte contemporáneo; el remodelado Tai Kwun; la oferta del distrito cultural de West Kowloon; el Museo de Arte, ampliado recientemente; la Avenida de las Estrellas y mucho más.
Bajo el dominio colonial, Tai Kwun reunía a la Comisaría central, el Tribunal y la cárcel de Hong Kong. Ahora es un monumento histórico y un espacio dedicado a las artes. En estos momentos Takashi Murakami, expone allí. Éste es un ejemplo de la transformación artística y del impulso que el Arte esta cobrando en Hong Kong.
PUBLICIDADHong Kong es un cruce de caminos y está aprovechando su energía como potencia cultural. El centro Xiqu es el teatro de la ópera: uno de los primeros edificios, totalmente acabado, del nuevo distrito artístico de la ciudad. Está al lado de la nueva estación de tren de alta velocidad de West Kowloon. Naomi Chung, directora de Xiqu Performing Arts, compara la arquitectura del centro con el Tai chí: "Todas la líneas son curvas. Y éste signo pertenece al Tai chí. El símbolo de xiqu es el "xi". El teatro está especializado en ópera tradicional cantosesa, y Chung ha pensado en obras para un público joven. "Cuidamos la presentación, utilizamos un método contemporaneo. Esto es lo que interesa a los jóvenes artistas", añade.
Cerca de allí, se sitúa otro espacio bautizado M+, aún en construcción. Será el museo de arte contemporáneo más grande de Hong Kong. Su directora, Suhanya Raffel aporta aquí la experiencia que adquirió en Australia y en la Tate Gallery de Londres. "A la espera de que el edificio esté acabado, contamos en el distrio Jowloon, en el oeste de la ciudad, con una pequeña sede que es como nuestro laboratorio de pruebas. M+ es es uno de los proyectos de infraestructuras culturales más abiciosos y más apasionantes del mundo", afirma.
De ahí nos dirigimos al centro histórico de Hong Kong y concretamente a Tai Kwun, la antigua comisaría de policía que abrió el año pasado. Ahora esta obra patrimonial es también símbolo de la renovación cultural de la ciudad. Leon Cheun del Hong Kong Jockey Club, que patrocina Tai Kwun, nos acompaña para echar un vistazo a la muestra del artista japonés Takashi Murakami, uno de los artistas nipones con mayor proyección internacional.
"Hasta ahora todo está saliendo genial. El primer año hemos tenido más de tres millones y medio de visitantes, mucho más de lo que esperábamos. A la inmensa mayoría el sitio les encantó y hemos sido capaces de aportar nuestra labor a la escena cultural de Hong Kong", destaca Cheun.
Otro centro cultural remodelado es el Museo de Arte de Hong Kong. Ahora cuenta con un 40 por ciento más de espacio, que antes, y se exhiben obras del patrimonio cultural chino y arte contemporáneo.
Eve Tam, su directora utiliza un simil para describirlo: "La historia del museo refleja como en un espejo, el desarrollo de Hong Kong. Fuimos el primer museo dedicado al arte, que permitió exposiciones de artistas orientales y occidentales en una misma plataforma, aquí en Hong Kong. La ubicación es estratégica, porque nos situamos en una zona muy turística, cerca de la Avenida de las Estrellas. Y estamos, asimismo cerca de Tsim Sha Tsui, con lo cual podemos contar con muchísimos visitantes procedentes del extranjero."
En la famosa Avenida de las Estrellas se rinde homanaje a la industria cinematográfica y a las estrellas locales. Quienes la visiten, además de Bruce Lee quizás reconozcan al realizador John Woo, a la actriz Gong Li y por supuesto a Jackie Chan. Hong Kong ha sido escenario de innumerables películas. Entre las más recientes figura: Skyscraper, un "thriller" de acción, protagonizado por Dwayne "the rock" Johnson.
Y del cine de acción, al arte en acción: Fred Scholle fundó la "Galerie du Monde" en Hong Kong en los años 70, con obras de artistas como David Hockney. En estos momentos expone la obra del artista chino-malayo C. N. Liew. La cita anual de Art Basel en Hong Kong ha catapultado a la ciudad en el mercado del arte, a nivel internacional, según Scholle. "La feria de Basel está atrayendo a comisarios de arte, especilistas de museos, académicos y coleccionistas de todo el mundo. Ha situado Hong Kong en el mapa", concluye.
Sholle cambió su California natal por Hong Kong. A la pregunta de qué le impulsó a quedarse en Hong Kong responde: "¿Qué me retiene aquí? ¿Además de la comida? Supongo que la forma de vida. Es una ciudad apasionante, cosmopolita, segura. Simplemente tiene todo lo que me gusta, para elegir un lugar donde vivir".