La reapertura se produce en un momento en que las restricciones internacionales a los sistemas financieros sirios comienzan a suavizarse en un intento de dar al país la oportunidad de reconstruirse tras 14 años de guerra civil.
Se ha reanudado la negociación en la Bolsa de Valores de Damasco tras seis meses de cierre, en un momento en que los nuevos dirigentes de Siria intentan apuntalar la maltrecha economía del país y comenzar la reconstrucción tras casi 14 años de guerra civil. La Bolsa siria estuvo cerrada durante los caóticos días previos a la destitución en diciembre del expresidente Bashar al Assad en una ofensiva rebelde relámpago.
El ministro sirio de Finanzas, Mohammed Yisr Barnieh, que asistió a la reapertura, dijo que es una señal de que la economía del país está empezando a recuperarse y que la Bolsa "funcionará como una empresa privada y servirá como un verdadero centro para el desarrollo económico de Siria, con un fuerte enfoque en lo digital", informó la agencia de noticias estatal SANA.
También dijo Yisr Barnieh que los nuevos líderes del país planean "facilitar las operaciones comerciales y abrir las puertas a prometedoras oportunidades de inversión". La reapertura se produce en un momento en que las restricciones internacionales a los sistemas financieros sirios comienzan a suavizarse.
Tanto Estados Unidos como la Unión Europea han anunciado el levantamiento de una amplia serie de sanciones impuestas a Siria bajo el régimen de la dinastía Al Assad. La semana pasada, la UE levantó las sanciones impuestas al país, pero impuso otras nuevas a personas y grupos que, según dijo, habían participado en ataques contra civiles durante la ola de violencia desatada en marzo en la región costera.
Kaja Kallas, jefa de Política Exterior de la UE, había anunciado la semana anterior su intención de levantar las sanciones. Kallas dijo que la medida era "condicional" y que las sanciones podrían reanudarse si el nuevo Gobierno de Ahmad al Sharaa, el excomandante rebelde que dirigió la carga que derrocó a Al Assad, no mantiene la paz.
Kallas afirmó en un comunicado que eliminar las sanciones "es sencillamente lo correcto, en este momento histórico, para que la UE apoye realmente la recuperación de Siria y una transición política que satisfaga las aspiraciones de todos los sirios".
También la semana pasada, Siria firmó un acuerdo energético por valor de 7.000 millones de dólares (6.100 millones de euros) con un consorcio de empresas qataríes, turcas y estadounidenses para el desarrollo de un proyecto energético de 5.000 megavatios destinado a revitalizar gran parte de la red eléctrica del país, devastada por la guerra.
El consorcio liderado por la qatarí UCC Concession Investments -junto con Power International USA y las turcas Kalyon GES Enerji Yatirimlari, Cengiz Enerji- desarrollará cuatro turbinas de gas de ciclo combinado con una capacidad total de generación estimada en unos 4.000 megavatios y una central solar de 1.000 megavatios.