En un nuevo plan de acción para impulsar la industria automovilística europea, la Comisión Europea se comprometió a apoyar la fabricación de baterías para vehículos eléctricos, una de las cinco iniciativas emblemáticas.
La Comisión Europea ha anunciado un plan de acción para apoyar el de la industria automovilística europea a tecnologías estratégicas clave, como las baterías, el software y la conducción autónoma, junto con la reducción de las cargas reglamentarias. El Comisario de Transporte Sostenible y Turismo, Apostolos Tzitzikostas, presentó el plan el miércoles. En él se enumeran cinco iniciativas emblemáticas de apoyo a la alicaída industria automovilística, que aporta el 7% del PIB de la UE y da empleo a unos 14 millones de personas en todo el bloque.
Sin embargo, el sector atraviesa dificultades debido a los riesgos de la cadena de suministro, los elevados costes de la energía y la excesiva dependencia de suministros críticos. Para hacer frente a esto último, la Comisión ha anunciado un fondo de 1.800 millones de euros para crear una cadena de suministro segura y competitiva de materias primas para baterías. Garantizar un suministro seguro de baterías y de las materias primas que las componen es uno de los problemas clave a los que se enfrenta la industria en su transición hacia los vehículos de emisiones cero.
"Fomentaremos la producción nacional para evitar dependencias estratégicas, especialmente en la producción de baterías", declaró el miércoles la presidenta de la Comisión, Ursula Von der Leyen. Además, la Comisión Europea hizo hincapié en la necesidad de que los fabricantes de automóviles europeos se conviertan en líderes del mercado en la fabricación de vehículos conectados, automatizados y con inteligencia artificial. Para ello, ha prometido una financiación de 1.000 millones de euros para el periodo 2025-2027.
Otros 570 millones de euros se destinarán a financiar la creación de puntos de recarga. El plan de acción prevé más ayudas para mejorar y reciclar la cualificación de los trabajadores del sector y promete más apoyo a las PYME.
Objetivos de movilidad limpia más flexibles pero esencialmente sin cambios
La Comisión mantiene sus objetivos de movilidad limpia, fijando el nivel de emisiones que pueden producir los coches y furgonetas nuevos para 2025, 2030 y 2035. Actualmente, el objetivo es reducir progresivamente las emisiones de los nuevos vehículos hasta 2035, momento a partir del cual sólo podrán fabricarse modelos de emisiones cero. "Nos ceñiremos a los objetivos de emisiones acordados, pero con un enfoque pragmático y flexible", declaró Von der Leyen.
Tras muchas peticiones de la industria automovilística, y en medio de la ralentización de las ventas de vehículos eléctricos en Europa, la Comisión prometió una nueva enmienda. Si se aprueba, los fabricantes de automóviles tendrán tres años en lugar de uno para cumplir sus objetivos de conformidad a los límites de emisiones, haciendo una media de sus resultados para 2025-2027. Si no cumplen en un año, pueden compensarlo en el siguiente.
A pesar de mantener los objetivos, la Comisión tiene previsto revisar las normas sobre emisiones de CO2 en el segundo semestre de 2025, antes de lo previsto. Mientras tanto, la Comisión se comprometió a ayudar a impulsar la demanda de vehículos europeos de emisiones cero y publicó una nueva propuesta para descarbonizar los vehículos de empresa. Estos vehículos representan el 60% de las nuevas matriculaciones.
Impulso a los fabricantes europeos en la escena mundial
Estados Unidos amenaza a Europa con un arancel del 25%, lo que supone una amenaza inminente para la industria automovilística del continente, mientras que la competencia de China a escala mundial también ha mermado los beneficios de los fabricantes europeos.
Para ayudar a cambiar la situación de los fabricantes europeos, la Comisión se comprometió a "garantizar la igualdad de condiciones" mediante una combinación de instrumentos. Entre ellos, medidas antisubvenciones y acuerdos de libre comercio. El Comisario mencionó a India como uno de los países "afines" con los que la UE podría firmar acuerdos comerciales beneficiosos.
Reacción mixta de la industria al Plan de Acción
La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) afirmó en un comunicado que, aunque acogía con satisfacción el plan de acción, "siguen faltando elementos clave. Se necesitan acciones ambiciosas para impulsar las infraestructuras, incentivos a la demanda y medidas para reducir los costes de fabricación de coches, furgonetas, camiones y autobuses", afirmó la ACEA.
Sigrid de Vries, directora general de ACEA, también añadió: "La flexibilidad propuesta para cumplir los objetivos de CO2 en los próximos años es un primer paso bienvenido hacia un enfoque más pragmático de la descarbonización dictado por las realidades geopolíticas y del mercado. Supone un respiro para los fabricantes de coches y furgonetas, siempre y cuando se pongan en marcha las tan necesarias medidas sobre la demanda y la infraestructura de recarga".
E-Mobility Europe se manifestó en un comunicado: "Lamentamos que se hayan debilitado los límites europeos de CO2 para 2025, con el riesgo de frenar las ventas de VE a corto plazo, empeorar la previsibilidad de las inversiones y perjudicar a los mejores". La secretaria general de ChargeUp Europe, Lucie Mattera, también expresó su preocupación: "Hoy la Comisión Europea ha reiterado los objetivos de emisiones cero para 2035. Mientras que las flexibilidades introducidas son un error que crea confusión en el ínterin, ya hay más de 11 millones de vehículos eléctricos en las carreteras europeas, y la transición está bien encaminada."
En respuesta a la crítica común de que no hay suficientes puntos de recarga, lo que arrastra la demanda, dijo: "El sector de la infraestructura de recarga de VE crece día a día, ofreciendo mayor velocidad y experiencias de recarga de VE mejoradas y sin fisuras". El principal problema de la nueva infraestructura de recarga es el a la red eléctrica.
Esto podría llevar muchos meses, si no años en algunos casos. Para solucionarlo, el Comisario ha dicho que Bruselas publicará recomendaciones para que los Estados acorten los tiempos de espera. La Comisión también está estudiando si debería ser obligatorio para los Estados establecer estas demandas como prioridad máxima para que los permisos puedan aprobarse más rápidamente.
Trump pausa los aranceles... a sus vecinos
Mientras tanto, al otro lado del charco, el presidente de Estados Unidos ha concedido una moratoria a los aranceles del sector del automóvil, aunque solo a sus vecinos de Canadá y México.
"Hemos hablado con los tres grandes fabricantes de automóviles. Vamos a conceder una exención de un mes a todos los automóviles que entren en el marco del TMEC", ha dicho la portavoz de la Casa Blanca Karoline Leavitt. No ha querido aclarar si los aranceles se aplicarán desde el 2 de abril ni si habrá una superposición de los mismos.