Cientos de manifestantes realizaron un haka frente al Parlamento de Nueva Zelanda en Wellington el martes, mostrando apoyo a los diputados del Partido Maorí que enfrentan suspensiones récord.
El haka, una poderosa danza maorí de desafío, es ampliamente respetada en Nueva Zelanda y a menudo se realiza en eventos deportivos, graduaciones y funerales. Aunque antes se veía como una danza de guerra, ahora se adopta como un orgulloso símbolo de identidad nacional.
En noviembre pasado, tres diputados del Partido Maorí realizaron un haka en la cámara de debate para protestar contra un proyecto de ley que, según ellos, socavaría los derechos indígenas. El acto interrumpió las sesiones y desde entonces ha llevado a llamadas para su suspensión, de hasta 21 días, la más larga en la historia parlamentaria del país. El martes se retrasó la votación sobre las sanciones y se reanudará el 5 de junio, con los partidos políticos aún divididos sobre el castigo.